martes, 17 de septiembre de 2013

Amor

Llego el día menos esperado de todos, maldito lunes sospeche que algo traías bajo el brazo, aunque en el fondo del alma siempre supe que este día llegaría pero pensé que podía estar preparado, una vez más empiezo a afrontar el olvido de otra persona que tanto he querido aunque diferente a todos, esta vez a través de una distancia, todavía envidio la manera con que lo hizo al decirme "vamos una semana" mientras que en mis insomnios de todas esas noches trataba de pensar como recuperarlo y se quede un poco más conmigo,  ya comenzaba a notarse su ida y hablo del corazón. Llame a su celular, escuche su voz y se lo notaba decidido con este nuevo comienzo, trate de pedirle una oportunidad pero en estos largos 6 meses jamás me la regalo y hoy decide dársela a alguien más, hubiese deseado mirarlo a la cara y decirle que lo iba a amar hasta el final pero su gran ceguedad con que a esto le llama "pesadilla" hizo que no aprenda a quererme y hoy ya busca refugio en otra alma, dejaba todo por una tarde con él, una tarde donde el mundo se rindiera a nuestros pies sin embargo él ya miraba con su alma a otra personita. Me adapte a su manera de querer, lo escuche y lo comprendí solo para poder demostrarle que no era cualquier pasar como él decía, sino que alguien que de verdad quería quererlo. Le explique que entendía que su corazón no iba a pertenecerme nunca pero le pedí seguir hablando como lo veníamos haciendo sin imaginar por ningún motivo que ya existía "otro", no entiendo porque en esa última conversación hermosa que solíamos tener, mostró alegría por habernos entendidos mutuamente y tratar de recuperar ese "algo" que tuvimos, pero solo duro menos de 24 horas, su corazón ya no estaba conmigo o al menos parte de ese sentimiento que supo darme. Llego a confiarme que tal vez yo era su excepción pero tampoco sirvió hoy cuando le hablo también sigo esperando minutos para esperar su respuesta, respuesta ya sin ganas porque el de los problemas siempre fui yo por supuesto. Estoy invadido de esta inmensa tristeza que acaba de atraparme, intentado escapar pero haciéndose algo imposible. Le prometí que cuando encontrase otro refugio lo dejaría ir porque es lo adecuado cuando se ama de verdad y aunque me cueste todas estas lágrimas, lo cumpliré, total el pedacito de su corazón ya no late por mí y al cabo su respuesta solo sería culparme de algo que solo trato de hacer bien, apartándome para no molestarlo en su nuevo amor porque no soy egoísta, lo pasé y me lo hicieron miles de veces y sé lo que se siente que te ignoren cuando ya te ilusionaron y seguramente esta sea la manera con que algún día cuando se viejito y se acuerde de sus locuras, ahí aparezca yo entre esos pensamientos y sepa que jamás le mentí cuando le dije que lo amaba y que acá iba a estar siempre que me necesite. En la famosa canción "Fix you" de Coldplay se aprende que cuando las lágrimas caen por tu rostro sabiendo que algo jamás se va a poder reemplazar nos hace pausarnos y cuando al fin lo vuelvas a encontrar aunque las luces no te guíen a casa, ahí voy a estar yo tratando de repararte una y las veces que sea.

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